En Mejillones y Puchuncaví: Cierre anticipado de 4 centrales termoeléctricas
El gobierno continúa con la campaña de dejar atrás el carbón y enfocarse en potenciar energías renovables y limpias para la producción eléctrica y energética del país. Se estima que para 2025, el 65% de las centrales termoeléctricas estén fuera de servicio.
Como una increíble noticia. Así se tomó en todos los sectores energéticos y medioambientales el hecho que 4 importantes centrales termoeléctricas del país se retiren de la actividad de forma inesperada y repentina.
En específico, el gobierno anunció que las centrales termoeléctricas Unidades Angamos 1 y 2 -ubicadas en Mejillones, Región de Antofagasta- y las Unidades Nueva Ventanas y Campiche -ubicadas en Puchuncaví, Región de Valparaíso- dejan de funcionar en 2025, haciendo que Chile acelere su proceso de descarbonización para dicho año y con miras a ser 100% neutrales de carbono para el 2050.
No obstante, ¿qué significa en la práctica el cierre temprano de estas centrales? Según datos entregados por el mismo Gobierno de Chile, con el cierre de estas centrales «se reducirán aproximadamente 6 millones de toneladas de CO2 al año, equivalentes a retirar de circulación más de 2,4 millones de vehículos particulares de las calles».
En este plan de retiro de carbón, el gobierno espera que para 2025 el 65% de las centrales termoeléctricas digan adiós y para el mismo año todas las industrias relacionadas a esto y ubicadas en Puchuncaví estén fuera de servicio.
En tanto para Mejillones, el 2025 tendrá un 80% de centrales retiradas.